Personalmente, me parece una excelente comienzo para prepararse para el nacimiento de Cristo. Dónde se puede disfrutar en familia en un ambiente de felicidad, esperanza y purificación. Este tiempo es más que todo el compartir con el prójimo que no tiene. El de perdonar y de enmendar.
En las dos primeras semanas sirve para meditar sobre la venida final de Jesús y en las otra dos semanas es tiempo para reflexionar. El adviento no significa comprar todo lo que veas y darlo a la familia, es más como un tiempo de humildad, dónde solo importa la intención.
Es tiempo de confiar en Dios
No hay comentarios.:
Publicar un comentario